Todas las cualidades de este juego van en sintonía, desde la forma de sus piezas hasta sus colores, que recuerdan a los que se encuentran en la naturaleza, ¡su diseño es de sobresaliente!
Niños y niñas podrán explorar sus propias capacidades y experimentar con diversos conceptos sobre patrones, simetría o equilibrio, mientras se divierten creando un sinfín de estructuras y composiciones.
Las piezas disponen de muescas que encajan de forma segura, para que los más pequeños puedan jugar inspirándose en las 10 tarjetas que incluye el set, o dejar volar la imaginación y construir de forma libre.
El diseño de este juego favorece la exploración de conceptos de ingeniería, diseño y simetría; de una forma natural, los más pequeños comenzarán a ensartar unas piezas con otras, desarrollando habilidades manipulativas, de atención y la imaginación.
Nos encantan los juegos que favorecen el aprendizaje a través de la experimentación, y este es un genial ejemplo de ello pues, desde una edad temprana, los niños y niñas podrán comenzar a realizar sencillas composiciones e ir avanzando en complejidad poco a poco.
Además, está realizado con materiales reciclados, ¡respetuoso con la naturaleza!
Contenido: 96 piezas.
Recomendado a partir de 2 años.